Nota Ascenso Ya: 'Hay ciclos que se cumplieron'

Se acabó. Para Atlanta todo terminó. Se acabó la última ilusión de pelear un ascenso, porque perdió con Armenio (con toda justicia) 2-0, desaprovechando la ventaja deportiva y se fue en la primera fase del Reducido. Se acabó, también, el ciclo de Salvador Pasini al frente del plantel bohemio, y con él, con Cristian Castillo a la cabeza, comenzará el éxodo de jugadores que no cumplieron. Los horrores tácticos, como dejar afuera a su hombre más talentoso, Ramón Fernández, la inclusión de jugadores que jamás rindieron a la altura de lo que el equipo necesitaba, la salida de otros que cumplían a satisfacción, la pésima relación con el plantel, algunas cuestiones (como la pelea con Chiqui Pérez) que salieron a la luz y el mal final hizo que Alejandro Korz expresara ante los micrófonos de AscensoYa y El Show de Atlanta que "Como todo, hay ciclos que se cumplen. Estamos contentos de ser uno de los pocos clubes que arrancaron y terminaron con el mismo entrenador, pero en los clubes, en los jugadores y en los técnicos" dando por sentado lo que se sabía a los gritos: Pasini no será el técnico de Atlanta. ¿Suenan nombres? Dos entrenadores, uno que jugó el Reducido y otro que casi lo juega, pero su misión era salvar del descenso a su equipo y cumplió. También se irán varios jugadores. Lo dicho acerca de Cristian Castillo, que decepcionó a los hinchas y cansó a los dirigentes, a tal punto que casi se le rescinde el contrato luego de la derrota en Adrogué. Atrás de él, y esto se informa con un poco de sorpresa, Javier Molina es otro que tiene todo listo para emigrar. Así lo expresó esta tarde "Dejamos todo, pusimos la vida y no alcanzó. Con respecto a mi futuro no se que decirte, no se que puede pasar..."(su voz se quiebra y aparecen lágrimas, el diálogo se interrumpe), pero todo parece indicar que el goleador emigrará a una categoría superior o tal vez al extranjero. Ramón Fernández se cansó del trato y se vuelve a Estudiantes. Fue el mejor jugador de Atlanta, de mitad de cancha hacia adelante, y no deja de llamar la atención que en los partidos decisivos se lo haya condenado al banco. Leo De Muner o Marcelo Scatolaro será el volante central de Atlanta, el otro se irá, y todo parece ser en ese orden. Por Daniel Fuente se intentará renovar el préstamo, se buscará la continuidad de Maxi Bogni y, salvo que salga una importante oferta, Llinás seguirá custodiando los palos bohemios. Sino, lo hará Diego Fernández. Lucas Ferreiro seguirá en Atlanta, se estima hasta el final de su carrera, aunque tiene cuerda para un rato largo aún. El resto se completará con jugadores que pida el nuevo DT y los chicos del selectivo.En fin, un año futbolístico se acaba de terminar para Atlanta. Nada grave, pero si doloroso teniendo en cuenta el plantel que lo conformaba. No pudo ser. Las discusiones, las peleas por los premios, y los malos planteos lo impidieron. A aprender de los errores.Atlanta: Llinás (5); Fuente (6); Bogni (3); Pérez (3); Cherro (3); Guzmán (4); Scatolaro (4); De Muner (3); Ferreiro (4); Molina (4); Ojeda (5)Cambios: Castillo (3) x Fuente; Fernández (6) x GuzmánAmonestados: Pérez, Bogni.Armenio: Luca (6); Fernández (6); Sosa (5); Kilmot (6); Olmedo (5); Trento (8); De la Vega (6); Montenegro (6); Pérez (6); Matos (8); Morales (5)Cambios: Brutto x Montenegro; Friggione x Matos; Faría x TrentoAmonestados: Olmedo, De la Vega.Goles: PT 16': La derecha del avance de ambos es una pista para quien quiera ir. Guzmán fue y perdió dos claras. Morales fue, centreó y Matos, solo, cabeceó al gol. 1-0.ST 9': Trento la pisa, amaga, la vuelve a pisar, vuelve a amagar, pasa, no pasa, avanza entre 4 jugadores bohemios, que, increíblemente, lo bajan en el área. Penal. Matos, a la izquierda de Llinás, lo canjea en 2-0.El Juez: Luis Álvarez (7): Sin dramas.La figura: Pablo Trento (8)/Mauro Matos (8): Ambos jugaron un gran partido. Trento por el peligro que generó por la derecha, y la jugada del penal. Mauro por los goles. Ambos facilitaron el pase de Armenio. Bien por duplicado.La pelea: Termina el partido, y el plantel de Atlanta busca el vestuario. El Chiqui Pérez llora desconsoladamente. Molina también, algo más sosegado. Los jugadores de Armenio comienzan a llegar, eufóricos, al vestuario visitante, distante 10 metros del local. Surge l canto "Despacito, despacito, despacito, le rompimos el c...". Llinás no se lo banca, quiere salir y lo tienen que parar entre cuatro.De Muner logra zafarse, y va a buscar al plantel de Armenio, que festejaba en su vestuario con la puerta cerrada. De Muner llega y patea la puerta y lo tiene que sacar la policía, en momentos que llega Fernando Ruiz, el DT de Armenio. Le explican la situación, el Cabezón entra, pide calma y vuelve la paz.