El Burrito, presente en Defe.
Defe estrenó pilcha. El 10 la luce y engancha.
Diego Gesto dgesto@ole.com.ar
El Burrito genera adentro y afuera: volvió a meterla de penal para que Defe sume su tercera victoria al hilo y hasta agota pósters con su imagen.
La redonda roza su pie derecho y el murmullo -expectante- surge. Cada vez que Ariel Ortega toca la pelota, un aura especial invade al Bajo Núñez. Todos -menos sus rivales- esperan ese quiebre de cintura o alguna de esas asistencias que marcan diferencia. La jugada aparece en escena y la gente de Defensores, la misma que jamás imaginó ver con sus colores a un jugador de tamaña consideración, se rinde a sus pies: “Ortega”, con la “e” bien pronunciada, es la música que suena en el barrio. Y ahí anda el Burrito, feliz y contenido, como afirman desde su entorno. Enchufado y con goles, aunque sean desde los 12 pasos. En fin, disfrutando lo que más le gusta hacer: jugar al fútbol.
El Dragón la tuvo complicada con Armenio. Si bien los dirigidos por Fito Della Picca le imprimieron vértigo al arranque, los de Ingeniero Maschwitz se acomodaron luego del primer cuarto de hora. Aunque vale mencionar la baja inesperada de Batallini.
) en el arranque, que derivó en el debut absoluto de Miguel Barbieri (categoría 93), quien se animó y saltó a la cancha como lateral derecho, aunque su puesto natural es central. En ese contexto, el circuito fluido que intenta pregonar Defe, no lograba engranar. Mientras Gómez y Pacheco complicaban con su velocidad en la primera parte. Así, de a poco, la visita tomaba el protagonismo principal del partido.
Sin embargo, ninguno de los dos generaba situaciones de riesgo en el arco rival. Pero el Dragón lo ganó porque en los momentos tambaleantes mantuvo su columna vertebral firme (léase Porcel y Alberich), porque Ortega se enchufó en el ST, y porque aprovechó la chance de la que el mismo jujeño se hizo cargo. Debió patear dos veces el penal, mientras todos los ojos se posaban sobre su espalda. Pero claro, el 10 facturó. Y fue un clink caja para el Dragón...
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